BMW R nineT Urban G/S 2017

La R nineT es como la gallina de los huevos de oro para BMW. La crearon pensando en servir de base para múltiples preparaciones y personalizaciones y como representante de la marca en el sector de las Café Racer y las motos ‘vintage’. pero si les dicen cuando se les ocurrió la idea, que iban a tener un éxito como el que tienen, creemos que nadie habría dicho que no y habrían firmado sin pensarlo. Muchos especialistas la han elegido como la base para sus creaciones y algunas, son realmente buenas, pero también hay que reconocer que la propia BMW tiene de las mejores variantes, como la espectacular BMW R nineT Urban G/S, una moto que bebe directamente del legado que dejó la primera BMW R80 GS.

Actualmente, las motos retro están muy de moda y las de aspecto campero mucho más, con las ‘scrambler’ como punta de lanza en la ofensiva de algunas marcas. La R nineT de BMW tiene su representante en el segmento tan boyante de las scrambler, pero esta moto da para tanto que la marca ha tomado el prototipo BMW Lac Rose, le ha dado un par de retoques y la ponen en la calle casi como una reedición de la mítica BMW R80 GS de 1980, aquella primera generación de una de las motos que más éxito ha tenido en el mercado. Y se parecen mucho en todo, desde la estética hasta el motor.

Para empezar, tanto la decoración como las formas del depósito, la careta del faro o las llantas, recuerdan irremediablemente a la R80 GS y el motor, procedente de la gama boxer, refuerza esa sensación. Evidentemente, este último es el mismo bicilíndrico que en el resto de la gama R nineT con 1.170 centímetros cúbicos y 110 CV. La Urban G/S además, se venderá tanto con llantas de aleación como con llantas de radios, ambas con 19 y 17 pulgadas delante y detrás respectivamente.

No hay que ser muy avispado para saber que si optamos por las llantas de aleación, los neumáticos serán de asfalto y si elegimos las llantas de radio ‘de toda la vida’, los neumáticos serán off road. Recuerdan mucho a los vistos en la R nineT Scrambler. Hay más cosas que juegan a su favor estéticamente como el reloj simple de la instrumentación, el soporte sobre elevado del manillar con la inscripción BMW Motorrad o hasta los fuelles de la horquilla.

Hay electrónica, el mercado y los tiempos mandan lógicamente. Así, el ABS es de serie (obligatorio) y se puede acceder al control de tracción de forma opcional. Y como no podía ser de otra forma en BMW, se pueden adquirir algunos accesorios para acercar aún más la imagen a la mítica BMW R80 GS como unas tapas para los cilindros al estilo ‘dos válvulas’, protectores para las manos y emblemas de aspecto clásico.